Restauración de un cuerno de marfil tallado
Con respeto y sentimiento hacia el elefante al que le fue arrebatado, he restaurado está talla rota, sucia y con muchos faltantes. Un trabajo minucioso que he disfrutado muchísimo.
Con respeto y sentimiento hacia el elefante al que le fue arrebatado, he restaurado está talla rota, sucia y con muchos faltantes. Un trabajo minucioso que he disfrutado muchísimo.
Me los trajeron uno en pedacitos y el otro, además de roto, le faltaba un pedazo en la boca muy grande.
Restauración de una foto antigua que habían pegado con papel celo. Despegarla fue ya complicado, pero luego, una vez puesta sobre el soporte de papel japonés, la reintegración cromática fue toda una aventura!
En la tabla, de finales del XVIII, perduran aún reminiscencias del rococó aunque ya se aprecia un incipiente neoclásico.
Cuando llegó al taller tenía la chapa levantada, con faltantes y quemada en alguna zona, le faltaba madera en el faldón y el cuero estaba nuevo, lo cual no encajaba con el resto..
Durante el confinamiento restauro en casa pequeños objetos como este abanico de carey con papel pintado y dorado.
Por fin terminé está bandeja de laca china que lleva conmigo muchos años. Este tiempo de confinamiento puede servir para acabar algunas cosas para las que nunca encontrábamos el momento.
Esta escultura de la Fertilidad se había caído y roto en pedazos. La he encolado con un adhesivo orgánico y estucado con cerorresinas. Ha quedado lista para volver con su dueña en cuanto acabe el confinamiento!
He pasado esta semana pintando cerezos en flor. Los árboles llenos de flores visten la isla, se han quedado en mi retina y salen por mi pincel…
Pájaros, flores y mariposas para poner en valor el concepto Bio Natura, la nueva apuesta de este hotel rural.